Lo hemos conseguido. Hoy se ha hecho público que la RAE va a actualizar la definición de matrimonio en su Diccionario de la Lengua Española. Es una muy buena noticia, el matrimonio es la base jurídica que sustenta la filiación de nuestros hijos y hoy en día está amenazado por un recurso ante el Tribunal Constitucional que se excusa en cuestiones semánticas.
Seguro que a muchos se nos ocurren mejores maneras de hacer una definición de matrimonio. Lo ideal sería que todos los matrimonios estuvieran incluidos en la misma acepción, de la misma manera que la ley española sólo cambió “marido y mujer” por “cónyuges”. Sin embargo, la RAE ha optado por incluir una acepción adicional en vez de ampliar el referente de la que ya hay. Y es probablemente una ampliación del referente lo que mejor define el cambio que ha sufrido la palabra matrimonio en el español.
Por otro lado, la nueva acepción incluye la restricción “en determinadas legislaciones”. Lo cual hace que el matrimonio entre personas del mismo sexo parezca más una mera cuestión jurídica que un profundo cambio social.
Sin duda, lo que mejor ha hecho la RAE es igualar los textos de las dos acepciones que curiosamente son diferentes al de la anterior edición del diccionario. La nueva redacción incluye una coletilla que restringe la finalidad de la unión matrimonial: “para establecer y mantener una comunidad de vida e intereses”. No hay ninguna referencia al amor romántico que la mayoría de los hablantes entendemos que es la base más común del matrimonio.
La lengua esta viva y la RAE continuará actualizando su diccionario. Pero es de justicia dar la bienvenida a este importante cambio que está aquí para quedarse, como nuestros hijos.